Los aminoácidos son utilizados como una forma de fertilizante, con acción bioestimulante, de uso foliar y/o radicular; Son los componentes básicos de las proteínas y son esenciales para el crecimiento y desarrollo de las plantas. Funcionan como complementos nutricionales y agentes estimulantes para mejorar la sanidad y el rendimiento de los cultivos.

Al ser aminoácidos de origen vegetal, extraídos de fuentes vegetales, presentan una mayor absorción y una mejor disponibilidad de otros elementos presentes para el cultivo, gracias a sus propiedades quelantes. Presentan un menor impacto ambiental y su uso es compatible y pueden utilizarse en agricultura ecológica.

Además, influyen positiva y destacadamente en factores y parámetros tan relevantes como: la estimulación del crecimiento vegetal, mejora en la absorción de nutrientes, mayor tolerancia al estrés, aumento de la calidad de los cultivos, estimulación del sistema inmune de las plantas (inductores de defensas), aumento en la eficiencia en el uso de otros fertilizantes y promueven la germinación y el enraizamiento.